"-Me la dieron -prosiguió Tentetieso meditabundo, mientras cruzaba una rodilla sobre la otra y la rodeaba con las manos- me la dieron... como regalo de no-cumpleaños.
-¿Perdón? -dijo Alicia con una expresión de perplejidad.
-No me has ofendido -dijo Tentetieso.
-Quiero decir, ¿qué es un regalo de no-cumpleaños?
-Un regalo que te hacen cuando no es tu cumpleaños, naturalmente.
Alicia meditó un momento. "Prefiero los regalos de cumpleaños", dijo por fin.
-¡No sabes lo que dices! -exclamó Tentetieso-, ¿cuántos días tiene el año?
-Trescientos sesenta y cinco -dijo Alicia.
-¿Y cuántos cumpleaños tienes?
-Uno.
-Y si restas uno a trescientos sesenta y cinco, ¿cuántos te quedan?
-Trescientos sesenta y cuatro, naturalmente.
... Lo que demuestra que hay trescientos sesenta y cuatro días en que podrías recibir regalos de no-cumpleaños.
-Desde luego - dijo Alicia.
-Frente a sólo uno de cumpleaños. ¡Te has cubierto de gloria!"