Ejercicio de confinamiento nº 20. Dánae (Tiziano)
Ejercicio de confinamiento nº 20. Dánae (Tiziano), 2020
Sobre la obra de Tiziano “Dánae” (1544.45), óleo sobre lienzo, 120x172 cm. Galerie Nazionale di Capodimonte. Nápoles
Acuarela sobre papel.
30 cm. x 20 cm.

Erase una vez un reino de la antigua Grecia llamado Argos que a su rey Acrisio, le profetizaron que moriría en manos del primogénito de su hija Dánae. Ante esa perspectiva encerró a su hija en una mazmorra según unos autores, o en una torre de bronce según otros. El caso es que habiendo llegado a oídos de Zeus que Dánae era bellísima, se las arregló para seducir a la doncella y convertido en lluvia dorada logró concebir un hijo al que llamarían Perseo, uno de los grandes héroes de la mitología, de ahí el nombre de Perseidas a la lluvia de estrellas llamada tambien "Lágrimas de San Lorenzo". Enterado Acrisio del nacimiento de la criatura encerró en un cofre a madre e hijo y lo echó al mar. Pero los dioses no quisieron la muerte de dos inocentes y empujaron el cofre hacia una isla. Polidectes, hermano del rey de esa isla quiso casarse con Dánae, pero al ser rechazado la retuvo como esclava y así creció Perseo. Pero la cosa no acaba ahí. Una vez convertido en rey Polidectes tuvo miedo de que Perseo quisiera vengarse de él pues se había convertido en un hombre fuerte e inteligente y lo envió a combatir contra la Medusa, iniciando una serie de aventuras maravillosas que contaremos en otro momento. La cosa es que después de muchas aventuras Perseo y su madre Dánae consiguieron volver a su tierra natal, a Argos. Una vez allí celebrando una competición atlética, Peleo tiró el disco y sin querer, por un accidente fatal, le dio a su abuelo matándolo en el acto, cumpliéndose así la profecía.

Que se sepa hay al menos seis versiones de este tema realizadas por Tiziano y su taller. En este lienzo que se conserva en Capodimonte tanto Cupido como la mujer dirigen la mirada a la lluvia de oro, aumentando el erotismo de la escena la colocación de las piernas de Dánae. El cuadro fue encargado por el cardenal Alessandro Farnese y se dice que la modelo fue una mujer de la que estaba enamorado.

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